Una mirada sobre este cambio en el juego de Los Pumas, algo de la Batalla de Auckland y lo que se viene. Con la alegría por el segundo triunfo de lado, abajo de la ducha fría, hablé con algunos neozelandeses y trato de imaginar el futuro cercano y no tanto.
Cuando uno escribe, graba en la piedra lo que piensa. Y claro, puede errar, como alguna conversión de Mo’Unga o la predicción de John Kirwan (Caballero de la Orden de Nueva Zelanda) el año pasado, en la previa del partido contra Los Pumas en Australia. Pero vale la pena hacerlo para agitar, en el mejor de los sentidos, las mentes de los leyentes y esperar que no sólo «reaccionen» con emojis sino que opinen.
Para los que no saben, fuera de los fanáticos límites de la Argentina existen fanáticos descontrolados que critican a su «Messi» aunque canten el himno a viva voz. El rugby, en la tierra de los reyes innegables, es cuestión de honor, de ego, de no aceptación a ser superados y lo que viene ocurriendo durante este 2022 es no sólo una daga clavada en el negro pecho sino en las almas de todos los fanáticos del rugby neozelandés. La historia la conocen todos los que estén leyendo esta nota: 2 de 3 perdidos en casa contra Irlanda, 1 de 2 contra Sudáfrica de visitantes y por ahora 0 de 1 en su propia casa y el corazón del reino de rugby del país, la gloriosa Christchurch.
Perder contra los de la Emerald fue doloroso. Ya habían dejado su invicto en USA, en una gira, pero en casa era otra cosa. Quizá la derrota en Sudáfrica podía ser más «esperable», pero el claro triunfo en el match 2 daba la ilusión que aquellos tropezones no habían sido una caída. Pero el triunfo de Los Pumas ya es otra cosa, y muy difícil de digerir. El sábado a las 22 horas de Christchurch, Los pumas habían cerrado una faena favorable, basados en un trabajo arduo e imperfecto, tanto como casi perfecta fue su defensa. Del otro lado, el siempre temible equipo negro con todas sus estrellas chocó contra Los Pumas, que batallaron con sus cuerpos y mentes, pudiendo poner supremacía en lo primero y llevando a los All Blacks hasta un punto de quiebre donde no podían concretar puntos y ya sobre el final, buscando con locura un empate, se quedaron sin nada.
Los Pumas hicieron muy bien algunas cosas, y no tan bien otras. El scrum debe mejorar y hay que llevarlo a otro nivel. ¿Cuándo? Cuando sea posible. No será este sábado, imagino, pero hay mucho para hacer. Se pudo ver dudas en los line outs, las mismas que tuvieron los oceánicos. Quizá lo que estuvo a la mano fue el fervor, el convencimiento y la fé. Esa fé que hace ir a Boffelli a recuperar una salida (sin dudas el más apto para esa tarea) y que González Samso «roba» en medio de una cortina negra y emprende una veloz carrera, como en sus épocas de seven, hasta el in goal negro. Y yo creo que ahí comienza el punto de quiebre mental, algo tan importante como pasar la pelota de manera correcta y en el momento cierto.
Stuart Barnes, comentarista de rugby inglés de Sky Sports y ex jugador de la Rosa, Newport, Bristol y Bath, dejó unos conceptos duros para el equipo nacional neozelandés. Dijo «tanto Foster como Cane carecen del intelecto necesario para este nivel de prueba» y que nunca pensó de calificaría de tontos al equipo de negro, pero «en Christchurch fueron tan estúpidos como los argentinos fueron inteligentes». Yo no sería tan irrespetuoso con la historia de los All Blacks y sólo aseveraría que la presión los mantiene apretados contra sí mismos, que son los jugadores que tantas veces han demostrado su capacidad y habilidades y que hay algo momentáneo que les impide desarrollar el juego con calidad que lo venían haciendo a través de los años.
Al mismo tiempo hay que aceptar que Los Pumas, cuando hay aún algunas posiciones que deben crecer mucho para estar al más alto nivel, vienen creciendo a través de una idea, un plan de juego y la entrega coordinada, que supera la entrega de siempre sin coordinación. Si algo han sabido hacer los All Blacks es precisamente encontrar agujeros en las reglas que les permitan realizar algo diferente sobre el campo de juego, y podría aburrirlos con la historia, pero siempre tienen un as en el bolsillo del pantalón que sacan cuando lo necesitan. Sobre el final del partido se olvidaron de los espacios abiertos y de «agotar los lados» y se fueron de cabeza a avanzar de a un metro, con la confianza que el método sudafricano les podía dar la necesaria victoria. Pero del otro lado había un plan tramado, con dobles tackles, rucks lentos y mucha paciencia para esperar, pescar la pelota o dar un zarpazo.
El stress es algo que todos padecemos y sólo los mejores pueden manejarlo con soltura. El line torcido de Codie Taylor en el «tiro del final» fue parte de eso que les está pasando a los de negro que antes no les pasaba. El NZ Herald escribió sobre los «All Backs aturdidos en una derrota histórica», que llevó a la peor estadística del XV del helecho plateado en la historia (17-1-10). Richard Knowler, del Stuff, habla de «la pesadilla» y señala a la NZRU como los culpables de haber permitido llegar hasta acá a ian Foster. Y obvio, desde otras publicaciones kiwis apuntaron contra el joven árbitro georgiano (27 años) que dirigía su tercer partido del Tier 1 (antes Gales-Canadá en 2021 y el fallido Irlanda-Italia en 2022, cuando el equipo azzurro jugó gran parte del partido con 13 jugadores).
Claro, a esta altura hay que reconocer que algunos jugadores de Los Pumas tuvieron puntos muy altos, como Julián Montoya, Emiliano Boffelli, Tomás Lavanini y Marcos Kremer. Quizá, lo mejor de la noche estuvo a la orden cuando el partido había terminado, mientras el festejo se apagaba pero no se borraban las sonrisas, Cheika y Montoya hablaron de humildad, de compromiso y de lo mucho que hay que mejorar. Y estoy de acuerdo. En un país donde no nos cuesta ser triunfalistas (o derrotistas) poner las cosas en el lugar correcto no es fácil, pero no hay que subirse al carro vencedor ni mirarlo desde atrás de una columna.
Tampoco demos por muertos a los All Blacks. Ellos saben de rugby y mucho. Los jugadores son hombres probados y con una calidad que han demostrado. Se han destacado por muchas innovaciones en términos de juego y pagaron con su propia sangre algunas acciones de ruck que Los Pumas llevaron adelante. El rugby es un juego de constante evolución, donde la fortaleza física juega un papel destacado pero que comparte cartel con la inteligencia de saber qué hacer y en qué momento, entendiendo que hay que tomar lo que el adversario te ofrece y no ser previsibles a lo largo del juego. Ah, sí, también jugar los 80 minutos con la misma intensidad, algo que esta vez en la fría noche de Christchurch Los Pumas han sabido administrar y convertir toda esa intensidad negra en pos de la dominación en una defensa que batallaba entre retroceder de a poco (tackles defensivos) y atacar con la defensa (tackles ofensivos) y tomar cada simple oportunidad que tuvieron. Justo una receta de la casa.
Cuando pienso en cómo juegan Los Pumas, veo que tratan de volver a la vieja y remanida forma de presión (sin penales) y tackle. Pero ahora le agregaron disciplina y paciencia, y algunos movimientos que le otorgan un crédito hacia la mejora continua (la posición del 12 en algunos ataques de formaciones fijas o móviles como primer lanzador, el ingreso del full back para lanzar en basculante un 10-15, la misión casi suicida de hacer dobles tackles que requiere de más despliegue y el mantener la intensidad y la concentración hasta que se acabe el juego.
El sábado será un partido para alquilar balcones y no puedo esperar a que se juegue (4:03 del 3 de septiembre, hora de AR en Hamilton, isla norte, la casa de Ian Foster y de los Chiefs. Si me preguntan, no imagino un triunfo Puma, pero lo sueño.
Marcelo Mariosa
Muy buena la nota Marcelo…
Impecable !!!!
Excelente y sensata crónica Marcelo.
El triunfo de los Pumas fue completamente merecido, a la vez que sabemos que no se pueden ganar muchos partidos contra este nivel de rivales retrocediendo en el scrum o no conservando por lo menos tus tiros en el line.
Si el trabajo que seguramente Cheika encarará mejora esos puntos bajos y mantiene lo mucho que se hizo bien el sábado, Los Pumas van a ser un rival formidable para cualquiera.
Excelente Negro ! Solo abriría un paréntesis en tema árbitro. El Georgiano no dudó en cobrar todo lo que vio sin distinción de camiseta. Una limpieza de costado o un sellado del ruck, un off side en el maul o un line torcido no cobrado, otrora se traducía en try para los AB que siempre fueron favorecidos y aprovecharon todas y cada una de estas ventajas. Saludos
Coincido en todo, un apunte: ví mejor a la primera línea con Mayco Vivas y Bello. Seguramente el sábado será un partido muy difícil para Los Pumas, pero da para ilusionarse.
Muchas veces tuve la sensación de que Los Pumas se quedan anestesiados en un gran triunfo y al siguiente partido de un cachetazo los vuelven a la realidad de las derrotas contundentes. Recordar el doloroso 39-0 después del gran triunfo 25-15. Creo que es importante trabajar no solo los aspectos técnicos dentro de la cancha sino el nivel de enfoque mental en lo que sigue especialmente después de un triunfo resonante. La única vez que percibí ese carácter fue en el mundial 2007 cuando al final del batacazo VS Francia Pichot los juntó a todos y dijo que no habían ganado nada y que era apenas el comienzo de un objetivo. (Lo dijo con otras palabras).
Está en el staff, en los jugadores, en los dirigentes ser un equipo lo más constante posible y salir de la comodidad de siempre ir de punto o simplemente quedarnos contentos con un batacazo cada tanto. Yo prefiero la primer opción xq la etapa de probar que se le puede ganar a los mejores históricos ya quedó probada. Hoy me gustaría que se sientan cómodos estando firmes entre los mejores. De ellos depende. Vamos Pumas!!
Entiendo que los muy buenos jugadores actuales no son tan buenos como los que hubieron. El recambio los estaría complicando, algo que quizá nunca pasó.
Negro querido
Perfecta tu nota, es lo que muchos pensamos y lo has plasmado como siempre con tu pluma.
Hay un largo camino para recorrer hasta el Francia 23, pero el cambio de mentalidad que le imprimio Cheika es buenisimo.
Hola, si coincido plenamente y puede ser que el próximo partido despertémos el monstruo dormido, pero también el rugby es actitud y cuando los 80 minutos mantienes eso, podes ser un equipo poderoso como los Pumas, tenemos competencia interna, internacional, jugadores, solo nos falta madurar una idea y concentrarnos todos en ella, el rugby es hacer lo básico bien y de esto los de Negro lo hacen a la perfección, acostumbremos a ganar contra los mejores, para soñar con una copa del mundo!!!!!!
Como siempre tocayo impecable tu pluma, creo que estos Pumas han logrado formar un equipo dentro y afuera de la cancha lo que les hace tener una actitud que no veíamos el año pasado. Parafraceando a Catamarca Ocampo «un gran equipo se basa en un 70% ACTITUD 20% Técnica y 10% Condición física» y creo que estos Pumas lo lograron. También creo que los de negro están pasando una crisis, al estilo de la nuestra a fines del 2021, que les ha hecho perder esa actitud que nos tienen acostumbrados. Como vos decís, tampoco imagino un triunfo, pero…